La madrugada de hoy (09-08-2018) el senado argentino dijo no a la legalización del crimen del aborto en su país. Esta decisión a favor de la vida en Argentina (cuya constitución todavía reconoce al catolicismo como la religión que el Estado sustenta) se ha convertido en una victoria que impulsa la lucha contra el aborto en toda Latinoamérica.

Un movimiento latinoamericano.

La iniciativa por la legalización del aborto en Argentina no es un fenómeno aislado. En Chile, por ejemplo, el pasado 1 de agosto se ingresó un proyecto de aborto totalmente libre, apenas meses después de que se aprobara la despenalización del aborto bajo tres causales.

Ecuador no es la excepción en este movimiento anti-cristiano contra la vida. Ya se encuentra en trámite en la Asamblea legislativa un reforma legal que busca legalizar el aborto en casos de violación, lo que se suma a los avances en favor del mismo tema que surgieron del Ministerio de Salud.

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Por tal razón, desde que el debate sobre el aborto se abrió en Argentina la discusión trascendió las fronteras del país. En efecto, varios grupos ciudadanos en Latinoamérica, así como religiosos, reaccionaron para que se defienda la vida del no nacido y se rechace la propuesta, al tiempo que los partidarios del aborto pedían que se implemente de forma "libre y gratuita".

Varias multinacionales y organismos internacionales también trataron de influir dentro de la decisión con publicidad que buscaba presionar al Senado para que decida, de espaldas al pueblo argentino, lo que ellas demandaban. En el New York Times, por ejemplo, AI publicó una proclama mencionando que de aprobarse en Argentina el aborto, ello abría la "esperanza" de que lo mismo pase en el resto de América Latina, cuya matriz cristiana ha avivado una enorme reacción en contra de la matanza de inocentes en el vientre materno. 

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Una victoria de las familias

Dentro de los grupos que se pronunciaron contra la legalización del crimen del aborto merecen especial mención las familias, las cuales protagonizaron masivas marchas en Argentina que lamentablemente fueron escondidas por los grandes medios de comunicación. El sábado anterior, por ejemplo, manifestantes contrarios a la legalización del aborto en ese país abarrotaron las principales avenidas del centro de Buenos Aires para gritar su oposición a la legalización del crimen del aborto.

Llegaron personas de todas las provincias del país y se reunieron en la céntrica avenida 9 de Julio. A lo largo de la protesta repetían la consigna ¡salvemos las dos vidas!, que se ha convertido en el lema de los grupos que se dedican a defender la vida tanto de las madres como la de los niños no nacidos.

El debate a favor y contra el aborto ha dividido profundamente a los argentinos que han salido numerosas veces a las calles durante toda la tramitación del proyecto.

Además, se han realizado multitudinarias manifestaciones por toda Argentina, al igual que vigilias de ayuno y oración.

El pasado domingo 15 de julio, además, cientos de médicos realizaron un “chaquetazo” en la Plaza de Mayo de Buenos Aires para rechazar el proyecto de ley.  Los presentes exhibieron banderas argentinas, pañuelos y globos con la consigna “¡Salvemos las dos vidas!”, “No cuenten conmigo” y “Legal o ilegal, el aborto mata igual”.

Dirigentes de  varias organizaciones afirmaron que no apoyarán “a ningún candidato que se exprese a favor del aborto”.